Gracias al Programa de Intercambios de nuestra Universidad, una de nuestras estudiantes realiza un periodo académico de cinco meses en Bélgica, fortaleciendo su formación en un entorno multicultural y de alta exigencia académica.
“Gracias a Dios ha sido una experiencia muy bonita y retadora a la vez. Es decir, es mucho más hermoso y retador de lo que pensé. Pero el resultado está valiendo la pena”.
Resume así su proceso: nuevos cursos, trabajo en equipo con compañeros de diversas procedencias y el reto de adaptarse a otro ritmo de estudio y de vida. El camino no ha estado exento de desafíos como el idioma, los horarios y la distancia de casa. Adaptarse a nuevos acentos e idiomas, organizar horarios distintos y sobrellevar el clima europeo exigió iniciativa y resiliencia.
Destaca también entre sus logros personales una mayor autonomía, confianza y una mirada más global de su carrera, que agradece de manera infinita a la oportunidad brindada por la Universidad Técnica del Norte.
Desde la universidad celebramos su testimonio y reafirmamos nuestro compromiso de ampliar estas oportunidades para la comunidad universitaria.

